Disponemos de servicio de diseño propio, que puede trabajar desde cero cuando el cliente no tiene una noción del diseño que necesita y sólo aporta el contenido a incluir. O también podemos partir de un boceto, idea o diseño provisional del cliente. Y también puede traer el cliente el arte final, pero si no está bien realizado técnicamente se devuelve con indicación de las deficiencias o lo mejoramos nosotros, pero normalmente supone un sobrecosto.
De cualquier manera, de casi todos los productos se puede presentar una prueba o varias gratuitas o de contrato hasta conseguir el OK del cliente.
Se utilizan sobre todo las pruebas de contrato cuando los colores CMYK deben ser muy exactos a los del arte final, como en un catálogo de muebles o un muestrario de pinturas, por ejemplo. Para pruebas de corrección ortográfica se utilizan las pruebas gratuitas.